16 de mayo de 2016

Wendy Guerra - Domingo de Revolución

"El sonido de la olla es el sonido de la cubanidad. La banda sonora contra el hambre de todas las casas en este país. Un tono asmático, entrecortado y eterno que suena a realidad. 
     Hizo café con leche con poco azúcar y una pizca de sal, como se lo hacía a mi padre. También unos plátanos verdes fritos con ajo, bien machucados, a eso se le llama «mogolla», y es lo que se desayuna en algunas zonas de Oriente. Ella es de allá, y por lo que estoy viendo mi supuesto padre también. 
      Buscó todos los poemas impresos dispersos por la casa, incluidos aquellos que ella había sabido tachar intentando variar su contenido para burlar la censura. Los puso sobre la mesa una vez servida con mantel de hilo y cubiertos de plata, jarras de cerveza checa para tomar Cristal y cucharitas de postre sin postre. 
     Cuando Gerónimo llegó, sudado y muerto de hambre, nos sentamos a almorzar. Todo parecía cotidiano, como si él y yo viviéramos por décadas en esta casa, pero no, recién acaba de mudarse, en los hoteles cubanos no hay privacidad. ¿Y en esta casa la hay? La privacidad en está isla es como el invierno o la nieve, sólo una ilusión. 
     El americano no entendía muy bien el ritual de comer con Márgara, que ya me había desplazado de la cabecera para acomodar al actor. El machismo leninismo es incomprensible para este hombre que convive con el feminismo profundo de sus colegas. Nada de eso parecía importarle en estos momentos, pues su intento por acceder al archivo histórico mediante petición oficial fue rechazado por las autoridades. La respuesta fue un «no» rotundo sin ningún tipo de diplomacia o delicadeza. 
     -Puedes tener dos premios Oscar y la opinión pública, las revistas y los diarios internacionales a tus pies, pero aquí eso, «compañero Gerónimo», no nos interesa. Y no, chico, no entras al archivo histórico porque no nos da la gana y punto -dije engolando la voz, imitando la de un militar ronco, cortante y desagradable. 
     -¿Cómo se puede hacer un filme sobre ese personaje sin consultar estos archivos? Eso no sería serio. 
     En Cuba, cuando las cosas salen mal la gente decide emborracharse, dormir o hacer el amor...

JAULA DE JUGUETE
Trampas veo en el camino
Pero parecen flores brújulas o espejos
Me hizo hembra la colección de jaulas que heredé de mi madre
Caí tan bajo como el grave sonido de mi orquesta
Allá voy arrogante y cautiva
La embestida promete lo peor
Muchacha jaula de juguete
Mi corazón virgen coloreado no hereda afrenta ni dolor
Y es que no hay jaulas en el cuerpo de una niña..."

Domingo de Revolución, Wendy Guerra, (Anagrama, 2016)

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